26/Febrero/2012 Santo Domingo, República Dominicana._ El 16 de julio de 1838, unos jóvenes dominicanos
fundaron una organización política clandestina denominada "La
Trinitaria", por estar compuesta por grupos de tres miembros. Los miembros
originales fueron Juan Isidro Pérez, Pedro Alejandro Pina, Félix María Ruiz,
Benito González, Juan Nepomuceno Ravelo, José María 13.Serra, Felipe Alfau y
Jacinto de la Concha. Luego se integraron Francisco del Rosario Sánchez, Ramón
Matías Mella y otros.
La Trinitaria fue la bujía espiritual y material de
la Independencia dominicana, ya que de acuerdo con los postulados del creador
de la nacionalidad dominicana, Juan Pablo Duarte, la independencia de toda
dominación extranjera, más que un reto de carácter emancipador del dominio
haitiano, constituía un anhelo de progreso y de libertad, para los nativos de
la parte española de la isla, que toda su existencia la habían vivido sometidos
a una u otra potencia extranjera. El grupo de patriotas, liderado por Duarte y
organizado en la sociedad secreta La Trinitaria, guiado por los más genuinos
deseos de independencia, se encontró con otros sectores que luchaban por
separar a la nación dominicana del dominio haitiano, y a la misma vez someter a
la República al dominio de cualquier potencia extranjera. El sacerdote Gaspar
Hernández propugnaba por un gobierno español, Pimentel escribió al cónsul
inglés en Puerto Príncipe para que ayudara en la expulsión de los haitianos y,
por último, Buenaventura Báez, junto al comerciante Joaquín Del Monte,
favorecía el apoyo francés. Sólo Duarte y su grupo propugnaban por la
independencia plena de la nación dominicana. El 2 de agosto de 1843, Duarte fue
expulsado del país con destino a Saint Thomas, por el general Charles Herald.
El movimiento Trinitario quedó entonces en manos de Francisco del Rosario
Sánchez, Ramón Matías Mella y Vicente Celestino Duarte. Los Trinitarios
acordaron juntarse el 22 de febrero de 1844 en la Puerta de la Misericordia
para desde allí lanzarse a la ocupación de la Puerta del Conde. Los haitianos
tenían su cuartel general en la Fortaleza Ozama, no lejos de allí. A media
noche, Ramón Matías Mella hizo tronar su trabuco, y el grupo dirigido por
Sánchez tomó el Baluarte del Conde. El 28 de febrero, los haitianos capitularon
con los Trinitarios y entregaron pacíficamente el poder de la parte este de la
isla, declarándose así la independencia definitiva del yugo haitiano.
Para finales de 1843, se podría decir que existían
tres movimientos políticos en la parte Este de la isla:
1. Los conservadores, miembros del antiguo partido
"boyerista", cuyos líderes principales se encontraban en desgracia al
perder Jean Pierre Boyer el poder. Tomás Bobadilla y José
Joaquín Puello eran de los principales líderes.
2. Los anexionistas, que aunque buscaban la
separación de la parte oriental, consideraban que no existían las condiciones
para una vida independiente por lo que su objetivo era conseguir la separación
a través de la anexión a una potencia europea. Este grupo, a su vez, podía
dividirse en tres:
a. Los que deseaban a ser parte nuevamente de
España; entre sus exponentes estaban los sacerdotes Gaspar Hernández y Pedro
Pamiés, en Santo Domingo, y el veterano General Andrés López Villanueva, en
Puerto Plata.
b. Otro movimiento anexionista buscaba la
protección de Inglaterra y lo encabezaba un propietario de Las Matas de Farfán
llamado Pimentel.
c. El tercer grupo, y el más importante de los
anexionistas, estaba compuesto por personas que habían ocupado puestos
administrativos dentro del gobierno haitiano y que creían poder alcanzar la
eliminación del dominio haitiano con ayuda de Francia, por lo cual se les
conocía como los "afrancesados". Los cabecillas visibles de este
movimiento eran Buenaventura Báez, rico propietario de Azua, y Manuel
Joaquín Belmonte, importante abogado y comerciante.
3. Los "trinitarios", conocidos también
como liberales, y que luchaban por conseguir la independencia total de la
antigua colonia española. Como su nombre lo indica, sus líderes eran miembros
de la Sociedad La Trinitaria y su jefe era Juan Pablo Duarte (por lo que el
partido también se le conocía como duartista).
Los "afrancesados" habían acordado con
el Cónsul general de Francia en Puerto Príncipe (Haití), Levasseur, el
desarrollo de un plan que permitiera la separación de la parte Este de la isla
y su anexión a Francia (Plan Báez - Levasseur). El Prócer Trinitario José María
Serra escribió, en 1887: "Los representantes de la parte del Este habían
recibido del Cónsul general de Francia en Puerto Príncipe, las seguridades de
que su gobierno apoyaría todo movimiento revolucionario que declarara la
voluntad del pueblo de unirse a Francia. La época de esa combinación sería para
el 25 de abril de 1844".
Continúa Serra: "Esta noticia la transmitió
uno de dichos representantes, Manuel María Valencia, a D. José Heredia, en
Baní, en los últimos días de noviembre de 1843. Súpela allí en diciembre e
inmediatamente vine a la ciudad y comuniqué a Sánchez, Jacinto y Tomás [de la]
Concha, en cuya casa estaba aquel ese día, y con ellos reunidos Ramón Mella,
Joaquín y Gabino Puello. Convínose allí en la necesidad de anticipar el
pronunciamiento y declarar la parte del Este Estado Libre e
Independiente". El día fijado fue el 27 de febrero de 1844, esto es, dos
meses antes de la fecha acordada por los "afrancesados". Y así, ambos
grupos, separadamente, empezaron a moverse en el mayor secreto, especialmente
los trinitarios, quienes no querían que los "afrancesados" descubrieran
que ellos se les adelantarían.
El día 1 de enero de 1844 los
"afrancesados" de Azua lanzaron un manifiesto dando cuenta de las
razones que los llevaban a buscar la separación de la República y a ampararse
bajo la protección de Francia. Quince días más tarde, el 16 de enero, los
trinitarios prepararon su propio Manifiesto, fruto de la unión de liberales y
conservadores, en el cual invitaban a la rebelión contra los haitianos.
El 13 de enero llegó a Santo Domingo, el
Cónsul francés Eustache Juchereau de Saint-Denys, quien estaba en
Port-au-Prince por haber sido acreditado como Cónsul en Cabo Haitiano, adonde
no había podido trasladarse debido al estado de destrucción en que se
encontraba esa ciudad desde el terremoto de 1842, lo que le dio ocasión de
participar de modo principal en la concertación del plan proteccionista (Plan
Báez-Levasseur) que se había propuesto al Gobierno Francés en relación con la
antigua colonia española de la isla, y por lo que se consideró preferible que
se asentara, aunque informalmente, en Santo Domingo, para que continuara dichas
negociaciones. A mediados de febrero de 1844 la población dominicana, en
especial la de la ciudad de Santo Domingo, se encontraba suficientemente
sensibilizada por la propaganda separatista de ambos grupos y se disponía a dar
el golpe. En la noche del 24 de febrero, se reunieron en la residencia de
Francisco del Rosario Sánchez, los independentistas Matías Ramón Mella, Vicente
Celestino Duarte, José Joaquín Puello y sus hermanos Gabino y Eusebio, Juan
Alejandro Acosta, Ángel Perdomo, Jacinto y Tomás de la Concha, Marcos Rojas,
Tomás Sánchez y Manuel Dolores Galván, quienes, luego de escuchar el relato de
las impresiones traídas por Gabino Puello, de su viaje para dar a conocer en
los pueblos de la región Sur, la Manifestación del 16 de enero, y luego de
sopesar los riesgos que podrían tener, para la causa independentista, el
conocimiento que demostraban poseer los "afrancesados" sobre los
planes y las deliberaciones de los trinitarios (además de mantener una actitud
de franca hostilidad, tal como la asumida por Buenaventura Báez en Azua),
decidieron por unanimidad de votos fijar la noche del 27 de febrero para dar el
grito independentista.
Como consecuencia de esa decisión, se hicieron las
designaciones siguientes: el Coronel Francisco del Rosario Sánchez fue nombrado
Comandante de Armas; el Coronel José Joaquín Puello, ayudante de Plaza; el
Coronel Gabino Puello fue también designado Ayudante de Plaza; el Teniente
Coronel Ángel Perdomo fue electo Jefe del Batallón de Artillería; Eusebio
Puello, Capitán Ayudante de Plaza; Marcos Rojas, Capitán encargado del Arsenal;
y Juan Alejandro Acosta, Comandante del Puerto. También se dispuso que Félix
Mercenario, Manuel María Valverde, Manuel Jiménez y Mariano Echevarria
figuraran entre los integrantes de la Junta de gobierno que se creara de
acuerdo con lo establecido en la Manifestación del 16 de enero.
Al día siguiente, 25 de febrero, fueron
despachados los correspondientes emisarios hacia las diversas regiones del
país, a fin de dar a conocer estas decisiones, para que quedaran completados
los últimos preparativos para la acción; entre estos se encontraba Victoriano Díaz
con mensajes dirigidos a los hermanos Pedro y Ramón Santana, en El Prado (El
Seibo) y para Juan Rodríguez, en Los Llanos (a fin de que ambos enviaran
refuerzos humanos para apoyar la acción que se produciría en Santo Domingo como
consecuencia del pronunciamiento de la separación).