Tiene
su origen en la villa francesa de Lourdes, a orillas del río Gave, cuando una
niña llamada Bernadette (Bernardita) Soubirous, nacida el 7 de enero de 1844.
La noticia de las apariciones se corrió por toda la comarca, y
muchos acudían a la gruta creyendo en el suceso, otros se burlaban.
Hubo 18 apariciones entre el 11
de febrero y el 16 de julio de 1858. Todas las apariciones se caracterizaron
por la sobriedad de las palabras de la Virgen, y por la aparición de una fuente
de agua que brotó inesperadamente junto al lugar de las apariciones y que desde
entonces es un lugar de referencia de innumerables milagros constatados por
hombres de ciencia. Tomada con incredulidad por el clero en los primeros
momentos, la manifestación fue recibiendo con el tiempo una acogida cada vez
más favorable, hasta el punto que los mismos romanos pontífices han dado
muestra de devoción a la inmaculada de Lourdes y han privilegiado su Basílica.
En las apariciones, la Señora exhortó a la niña a rogar por los
pecadores, invitó a la conversión y a la penitencia; pidió que edificaran una
capilla y que fueran en procesión y mando a Bernadette a besar la tierra, como
acto de penitencia para ella y para otros. La Virgen le había dicho:
"Rogarás por los pecadores...Besarás la tierra por la conversión de los
pecadores". Como la Visión retrocedía, Bernardita la seguía de rodillas
besando la tierra.
El pueblo presente en el lugar también la imitó y, hasta el día de hoy, esta práctica continúa.
El pueblo presente en el lugar también la imitó y, hasta el día de hoy, esta práctica continúa.
El 25 de marzo, a pedido del párroco del lugar, la niña preguntó
a la Señora ¿Quién eres?, y ella le respondió: "Yo soy la Inmaculada
Concepción".
Luego Bernadette fue a contarle al sacerdote, y él quedo
asombrado, pues era casi imposible que una jovencita analfabeta pudiese saber
sobre el dogma de la Inmaculada Concepción, declarado por el Papa Pío IX en
1854.
En la aparición del día 5 de abril, la niña permanece en
éxtasis, sin quemarse por la vela que se consume entre sus manos.
El 16 de julio de 1858, la Virgen María aparece por última vez y se despide de Bernadette.
Las apariciones fueron declaradas auténticas el 18 de Enero 1862.
El 16 de julio de 1858, la Virgen María aparece por última vez y se despide de Bernadette.
Las apariciones fueron declaradas auténticas el 18 de Enero 1862.
En 1876, se edificó allí la actual Basílica, uno de los lugares
de peregrinación del mundo Católico.
Bernadette fue canonizada por el Papa Pío XI el 8 de diciembre de 1933.
Bernadette fue canonizada por el Papa Pío XI el 8 de diciembre de 1933.
Lourdes es uno de los lugares de mayor peregrinaje en el mundo,
millones de personas acuden cada año y muchísimos enfermos han sido sanados en
sus aguas milagrosas.
La fiesta de Nuestra Señora de Lourdes se celebra el día de su
primera aparición, el 11 de febrero.
EL MENSAJE DE LA VIRGEN
La enseñanza espiritual que dejó Nuestra Señora para todo el
mundo.
El Mensaje que la Santísima Virgen dio en Lourdes, puede resumirse en los siguientes puntos:
El Mensaje que la Santísima Virgen dio en Lourdes, puede resumirse en los siguientes puntos:
1.- Es un
agradecimiento del cielo por la definición del dogma de la Inmaculada
Concepción, que se había declarado cuatro años antes por Pio IX (1854), al
mismo tiempo que así se presenta Ella misma como Madre y modelo de pureza para
el mundo que está necesitado de esta virtud.
2.- Derramó
innumerables gracias de sanaciones físicas y espirituales, para que nos
convirtamos a Cristo en su Iglesia.
3.- Es una
exaltación a la virtudes de la pobreza y humildad aceptadas cristianamente, al
escoger a Bernadette como instrumento de su mensaje.
4.- Un
mensaje importantísimo en Lourdes es el de la Cruz. La Santísima Virgen le
repite que lo importante es ser feliz en la otra vida, aunque para ello sea
preciso aceptar la cruz. "Yo también te prometo hacerte dichosa, no
ciertamente en este mundo, sino en el otro"
5.- En
todas la apariciones vino con su Rosario: La importancia de rezarlo.
6.- Importancia
de la oración, de la penitencia y humildad (besando el suelo como señal de
ello); también, un mensaje de misericordia infinita para los pecadores y del
cuidado de los enfermos.
7.- Importancia
de la conversión y la confianza en Dios.
PRIMEROS
MILAGROS
26 de febrero: El primer
milagro
El agua milagrosa obró el primer milagro. El buen párroco de
Lourdes había pedido una señal, y en vez de la muy pequeña que había pedido, la
Virgen acababa de darle una muy grande, y no solo a el, sino a toda la
población.
Había en Lourdes un pobre obrero de las canteras, llamado
Bourriette, quien veinte años antes había tenido el ojo izquierdo severamente
lastimado por la explosión de una mina. Era un hombre muy honrado y muy
cristiano, quien mandó a la hija a buscarle agua a la nueva fuente y se puso a
orar, aunque estaba un poco sucia, se froto el ojo con ella. Comenzó a gritar
de alegría. Las tinieblas habían desaparecido, no le quedaba mas que una ligera
nubecilla, que fue desapareciendo al seguir lavándose.
Los médicos habían dicho que el jamás se curaría. Al examinarlo
de nuevo no quedo mas remedio que llamarle a lo sucedido por su nombre:
milagro. Y lo mas grande era que el milagro había dejado las cicatrices y las
lesiones profundas de la herida, pero había devuelto aun así la vista.
Muchos milagros siguen sucediendo en Lourdes por lo que en el
santuario hay siempre una multitud de enfermos.
4 de marzo
Siguiendo su costumbre, Bernardita, antes de dirigirse a la
gruta, asistió a la Santa Misa. Al final de la aparición, tuvo una gran
tristeza, la tristeza de la separación. ¿Volvería a ver a la Virgen?
La Virgen siempre generosa, no quiso que terminara el día sin
una manifestación de su bondad: un gran milagro, un milagro maternal.
Un niño de dos años estaba ya agonizando, se llamaba Justino.
Desde que nació tuvo una fiebre que iba poco a poco desmoronando su vida. Sus
padres, ese día, lo creían muerto. La Madre en su desesperación lo tomó y lo
llevó a la fuente. El niño no daba señales de vida. La madre lo metió 15 minutos
en el agua que estaba muy fría. Al llegar a la casa, notó que se oía con
normalidad la respiración del niño.
Al día siguiente, Justino se despertó con tez fresca y viva, sus ojos llenos de vida, pidiendo comida y sus piernas fortalecidas.
Al día siguiente, Justino se despertó con tez fresca y viva, sus ojos llenos de vida, pidiendo comida y sus piernas fortalecidas.
Este hecho conmocionó a toda la comarca y pronto a toda Francia
y Europa; tres médicos de gran fama certificaron el milagro, llamándolo de
primer orden.
LAS
APARICIONES DE LA VIRGEN Y LA IGLESIA
El 18 de Enero 1862, el obispo firmó la pastoral aprobando las
apariciones. Su carácter sobrenatural y la vida tan auténtica de la vidente.
1874: el Papa Pío IX concedió al santuario el titulo de
Basílica.
1876: corono solemnemente la estatua de la Virgen.
1876: corono solemnemente la estatua de la Virgen.
León XIII: aprobó el oficio y misa de Lourdes
Pío X llamo a Lourdes: "sede del poder y de la misericordia
de María, donde tuvieron lugar maravillosas apariciones de la Virgen"
1907: este mismo Papa extendió la celebración de la fiesta de Nuestra Señora de Lourdes a toda la Iglesia universal.
1907: este mismo Papa extendió la celebración de la fiesta de Nuestra Señora de Lourdes a toda la Iglesia universal.
Pío XI: afirmo: "Lourdes, donde la Virgen se apareció
varias veces a la bienaventurada Bernardita, donde exhorto a todos los hombres
a la penitencia".
Elevó al honor de los altares a Santa Bernardita Soubirous el 8 de Dic 1933.
Elevó al honor de los altares a Santa Bernardita Soubirous el 8 de Dic 1933.
Pío XII: escribió la encíclica "La peregrinación a Lourdes",
el mas completo de todos los documentos sobre Lourdes"
Juan XXIII: en la clausura del centenario de las apariciones de
Lourdes, recordaba lo siguiente: "La Iglesia, por la voz de sus Papas, no
cesa de recomendar a los católicos que presten atención al mensaje de
Lourdes"
Finalmente, Juan Pablo II es el primer Papa que ha peregrinado a
Lourdes, en el año de 1983, con motivo del 125 aniversario de las apariciones.
Allí ofició la Santa Misa el día 15 de Agosto, afirmando dos veces:
"Venimos en peregrinación a Lourdes, donde María dijo a Bernardita:
"Yo soy la Inmaculada Concepción" y añadió: "Aquí habló con una
simple muchacha de Lourdes, rezó con ella el rosario, le dio varios mensajes, y
concluyó el Papa diciendo: "la Virgen viene a salvar a los pecadores.."
PUNTOS
DE REFLEXIÓN SOBRE LAS APARICIONES EN LOURDES
Enseñanza
espiritual sobre los signos visibles de la primera aparición.
1.- Rodeada de luz: es el símbolo
de la luz de la fe, a la cual nos abrimos por el Bautismo. La fe es la luz de
la vida con que debemos brillar ante el mundo. Debemos hacer resplandecer la fe
por la santidad de nuestras vidas.
2.- La luz era
tranquila y profunda: en la fe cristiana hallaremos el reposo para nuestra
alma.
3.- De belleza
incomparable, no hay nada igual aquí en la tierra: trabajar intensamente
por adquirir la verdadera belleza que es la del alma, a fin de que Dios pueda
contemplarnos con agrado.
4.- Ropaje tan blanco,
tan puro, tan delicado que jamas tela alguna pudo imitar: de que pureza tan
perfecta y delicada ha de estar revestida delante de Dios, nuestra alma; ya que
el pecado mancha nuestro blanco ropaje.
5.- Pies
desnudos, brillando sobre cada uno de ellos una rosa luminosa: Los pies
desnudos nos predican la pobreza evangélica, esta bella y sublime virtud a la
cual Jesús ha prometido el mismo Reino de los Cielos. Las rosas luminosas:
Jesús nos envía a difundir por todas partes el buen olor de Cristo, el divino
perfume del Evangelio.
6.- Las manos
siempre juntas, con el santo rosario: en ferviente oración, orando siempre
y sin interrupción. La oración nuestro alimento constante, la respiración del
alma, pues todas las virtudes solo nacen en un alma que ora.